Los Arabos, Matanzas. 28 de diciembre de 2010. En horas de la tarde del martes, 28 de diciembre, fue devuelta Yirisleidis Álvarez Pérez a su padre, Carlos Álvarez Guerra, activista quien fue injustamente encarcelado por escribir letreros antigubernamentales en la fachada de su vivienda.
Yirisleidis fue secuestrada e internada por el régimen castrista en un orfanato cuyo lugar era desconocido por su padre durante su detención. Según sus declaraciones, su hija fue devuelta con “el ojo derecho negro y un golpe en el cachete”.
“La impresión que me da mi hija es que fue manipulada por la Seguridad del Estado. Eso se veía a la legua. Trataron de virármela porque la niña no quería ni que yo la cargara y la besara,” declaró Carlos Álvarez Guerra al Directorio Democrático Cubano.
Los oficiales presentes durante la devolución de Yirisleidis intentaron que su padre firmara un documento antes de que se le entregara la niña, a lo cual Álvarez Guerra se negó completamente.
“Lloré por ver a mi hija que cuando ellos me la quitaron a la fuerza estaba sanita. Ahora verla de esa forma me partió el alma,” declaró Álvarez Guerra. “Me la quitaron a la fuerza pero no me doblegaron ni un segundo, ni en la prisión ni en la calle. A mí no me doblegaron. Fue un dolor muy triste ver a mi hija que este gobierno me la estaba torturando y me la estaba golpeando. Una tortura psicológica que este gobierno totalitario de Fidel Castro tiene contra mi hija de cuatro años y ocho meses.”
Después de meses de campaña para respaldar al activista Carlos Álvarez Guerra, la devolución de su hija Yirisleidis es un triunfo de la resistencia cubana.
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